martes, 5 de junio de 2007

Viaje Invisible – El Gato Espint

Desciendo de la estrella que me ayuda a conocer los distintos lugares que he recorrido, nunca me hubiese imaginado que sería la última vez que la vería. Al caminar, un escalofrío recorre todo mi cuerpo, trato de arroparme con mi abrigo, pero antes de lograrlo, un inmenso temblor sacude la tierra que desde hace mucho no pisaba.

Me cobijo en las faldas de un cerro, coronado por un árbol de tronco grueso en color marfil, apoyo mi espalda en su corteza. Ahora todo se ha tranquilizado, la gente en los campos parece tan ajena a todo lo que puedo apreciar desde aquí. Mis pensamientos son interrumpidos por una pequeña sombra.

Observo a mi alrededor y no veo nada en movimiento, prefiero alejarme del árbol y me acerco a un estrecho camino, compruebo que esa presencia sigue mis pasos. Al girar, unos ojos redondos se clavan en mi mirada, se trata de un gato azul de hermosos ojos anaranjados, realmente podrá verme, he comprobado que nadie ha notado mi existencia en esta forma. Una diminuta voz interrumpe mis meditaciones.

-No temas, no soy un peligro para ti-. Dijo el gato ante mi evidente perplejidad.
-Soy Espint, y si cuestionabas tu existencia, yo he esperado mucho para encontrarte, ahora seré tu compañero de viaje-. Luego de terminar esta frase se acerca hasta mi ubicación.
-No tienes elección, tu estrella no volverá, ahora el viaje invisible será dirigido por mí-. Ahora el gato se sube a mis hombros de un ligero salto.

Ante el monólogo de este gato, extrañamente no puedo negarme, siento una completa armonía cerca suyo, no me agrada la idea de ser guiado por un felino parlante, pero este viaje no tiene mucho de realidad después de todo.

Ha cambiado la modalidad, pero este viaje aún continúa…


5 comentarios:

Caliope dijo...

Cuando era un chiquillo, que alegria!
jugando a la guerra, noche y dia
saltando una alberga, verte a ti y asi
en tus ojos, algo nuevo, descubrir

Las rosas decían que eras mía
y un gato me hacía compañí­a,
desde que me dejaste
yo no se, por qué, la ventana es más grande sin tu amor

El gato que está en nuestro cielo
no va avolver a casa si no estás
lo sabes mi amor, que noche bella
presiento que tu estas en esa estrella

El gato que está triste y azul
nunca se olvida que fuiste mí­a
más se que sabrá de mi sufrir
porque en mis ojos...
Una lagrima hay

Querida querida, vida mia
reflejo de luna que reía
si amar es errado, culpa mí­a
te amé en el fondo, ¿que es la vida? no lo se

El gato que está en nuestro cielo
no va avolver acasa si no estás
lo sabes mi amor, que noche bella
presiento que tu estas en esa estrella

El gato que está¡ triste y azul
nunca se olvida que fuiste mía
más siempre serás en mi mirar
lagrima clara de primavera

El gato que esta en la oscuridad
sabe que en mi alma...
Una lágrima hay...

Con cariño para mi amiguin spica.

cludia

..... dijo...

....el gato debe ser pariente de Laura...a veces en nuestro camino nos topamos con diferentes personas que toman extrañas formas...
....nos vemos pronto: pa´l concierto de HOLDEN...besos x miles

kalubea dijo...

No sé, quizás sonare media loca o qué, pero tengo una extraña cercanía con los gatos.
¿Me creerás que tengo 5 y que en algún momento de la vida llegue a tener 11? lo sé, suena ultra extraño y tirado de las mechas, pero así tal cuál fue y es. Siempre se les pinta de traicioneros y con ese cartel que dice 'tenga cuidado con ellos', pero puedo dar fe que no es no son como los pintan, por ende... no desconfíe del gato azul de ojos anaranjados, puede que lo guíe bien en su nuevo camino.

Hace mucho que no pasaba por acá y ha sido, nuevamente, un agrado.

Saludos!
Claudia.-

Nico dijo...

No sé porque razón tu relato me es tan familiar al principito.
Respecto al gato, tú sabes que no soy muy adepto a estos "animalitos", salvo por Garfield que es naranja y tiene rayitas negras y es una caricatura.
Es el único gato fiel.
Ten cuidado, porque los gatos son animales traicioneros y en vez de avanzar, te haga retrocer en tu viaje.

Shadow dijo...

Devuelvo la visita muy agradable que dejó una estela de brillos en las penumbras de mi hogar.

Pero al llegar a estos rincones, he kedado mas ke gratamente sorprendido, un sabroso festín de letras, que cualkier criatura de la noche puede devorar sin saciarse.

Saludos muy cordiales